Felicidades AMCPMX

   El día de ayer participé como invitado en el ciclo de conferencias con motivo del festejo por el 8vo aniversario de la asociación profesional a la cual pertenezco, la Asociación Mexicana de Contadores Públicos en Redes Sociales (AMCPMX); sintiéndome muy honrado con la invitación.

   Con independencia del tema que abordé en mi participación, que me dejó muy satisfecho, y el aprendizaje que me dejó el prepararla, me di la oportunidad para llegar a reflexionar acerca de lo que han significado para mí estos 8 años de membresía, y llegar a la conclusión de como pertenecer a esta agrupación me ha ayudado en mi crecimiento tanto personal como profesional, en el momento que aquellos que miraba como mis maestros, se han convertido en mis amigos, y mis amigos en maestros, en mentores.

    Se que nos queda mucho camino por recorrer, muchos retos, metas y sueños que alcanzar, por lo pronto aprovecharemos en celebrar un aniversario más de nuestra agrupación.

Felicidades a todos los que formamos parte de el

Hacia donde vamos

   En un mundo en constante cambio como el que vivimos, resulta necesario hacer un alto y revisar hacia donde va nuestra profesión, que retos nos esperan, y de que manera podemos mejorar la imagen que se tiene de nosotros en los diferente sectores de nuestra sociedad.

   Se ha vuelto sumamente necesario que el contador  deje de ser sólo el procesador de la información, aquel que calcula impuestos y ya.

   Es hora de transformarnos en unos asesores de negocios completos, aprovechar nuestros conocimientos técnicos acerca de la situación financiera de la empresa, ser siempre un aliado en el crecimiento de sus negocios, un consejero, que los acompañará en su crecimiento, que eso es lo que nuestros clientes esperan de nosotros.

Cuándo perdimos la capacidad de soñar?

Cuándo perdimos la capacidad de soñar?

   En algún momento de nuestra vida adulta, permitimos que los años, nuestro crecimiento, quizá nuestro trabajo, el estrés, los problemas económicos y quién sabe que otras razones más  fueran callando la voz de ese niño interior, ese niño que tenía sueños, que tenía ilusiones. Ese niño qu alguna vez soñó con ser un gran deportista, un famoso futbolista, otros habrán soñado con ser artista, cantante, actor, doctor, médico, bombero policía, un escritor reconocido premiado con el Nobel, tal vez científico o inventor y muchas otras cosas.

   Soñábamos vernos en una gran casa, algunos con alberca, grandes jardines, en fin, podríamos extendernos en sueños infantiles y llenaríamos muchos renglones más con sueños.

  La realidad es que pocos ya soñamos,estamos tan ocupados por lo urgente, que no le damos valor a lo realmente importante, no nos percatamos que nuestras ambiciones y nuestras ocupaciones del día a día no nos permiten soñar; dejamos que los medios que se requieren para cumplir nuestros sueños, se conviertan en el fin y motor de nuestras vidas, nos olvidamos de reír, nos da miedo dejar lo que creemos que son sueños para volar.

   Cuándo llega el momento de darnos cuenta de que no soñamos, y queremos retomar, más a sabiendas que eso nos va a llevar a alturas insospechadas, caemos en cuenta que hemos olvidado como hacerlo, notamos que con mucho esfuerzo, y quizá algo de frustración y angustia de a poco, vamos recuperando eso, el soñar, el anhelar, el ilusionarnos con algo nuevamente.

Los Sonidos del Silencio

Los Sonidos del Silencio 

(Mayer Levy D.)


En las noches, cuando todos están dormidos,
se oyen los sonidos del silencio.
Se alcanza a escuchar el ulular del viento,
las hojas caer.

Yo acostado en mi cama,
pienso en lo feliz que soy,
el amor que nos tenemos
Y en lo que hemos creado.

En las noches...
Los sonidos del silencio
me hacen pensar en ti.

Como Hemos Cambiado

Como Hemos Cambiado
(Mayer Levy D)

Como hemos cambiado...
Lo que de niños fue un Sueño
hoy son recuerdos, esperanzas
sólo eso

Cómo hemos Cambiado
Lo que ayer nos motivó
Hoy nos daña

Te das Cuenta que cambiaste
cuando un café, o el pensar en dinero
Te quita el sueño, cosas que ayer
Te provocaban solo risas

Sí hemos cambiado,
más felices, satisfechos, con logros
pero quizá un enorme peso en los hombros